jueves, 29 de mayo de 2014

La agroecología - 3

El enfoque agroecológico aparece como respuesta a la lógica del neoliberalismo y la globalización económica, así como a los cánones de la ciencia convencional, cuya crisis epistemológica está dando lugar a una
nueva epistemología, participativa y de carácter político. Y ello en el sentido de “reinterpretar la cuestión del poder, insertándola en un modelo ecológico, de lo que se desprende que el ámbito real del poder es lo social como organismo vivo, como ecosistema. Es el enfrentamiento entre un modelo de
sistema artificial, cerrado, estático y mecanicista (el Estado); y un modelo de ecosistema dinámico y plural (la sociedad)” 

(Garrido Peña, 1993: 8).

Pero.... ¿Dónde está la sociedad? .... ¿Que es eso? ...

La agroecología - 2

La agroecología critica al pensamiento científico: por un lado, desvelando el etnocentrismo sociocultural de las ciencias sociales como construcción histórica europea que centra su pesquisa en una única propuesta civilizatoria que excluye de su acervo conceptual a las demás. Y, por otro lado, pretendiendo modificarlo probando además la necesidad de complementar los hallazgos científicos agropecuarios y forestales con aquellas “prácticas campesinas e indígenas” que han mostrado su sustentabilidad histórica.

miércoles, 28 de mayo de 2014

Aullido


II 
¿Qué esfinge de cemento y aluminio abrió sus cráneos y devoró sus cerebros y su imaginación? 
¡Moloch! ¡Soledad! ¡Inmundicia! ¡Ceniceros y dólares inalcanzables! ¡Niños gritando bajo las escaleras! ¡Muchachos sollozando en ejércitos! ¡Ancianos llorando en los parques! 
¡Moloch! ¡Moloch! ¡Pesadilla de Moloch! ¡Moloch el sin amor! ¡Moloch mental! ¡Moloch el pesado juez de los hombres! 

¡Moloch la prisión incomprensible! ¡Moloch la desalmada cárcel de tibias cruzadas y congreso de tristezas! ¡Moloch cuyos edificios son juicio! ¡Moloch la vasta piedra de la guerra! ¡Moloch los pasmados gobiernos! 

¡Moloch cuya mente es maquinaria pura! ¡Moloch cuya sangre es un torrente de dinero! ¡Moloch cuyos dedos son diez ejércitos! ¡Moloch cuyo pecho es un dínamo caníbal! ¡Moloch cuya oreja es una tumba humeante! 

¡Moloch cuyos ojos son mil ventanas ciegas! ¡Moloch cuyos rascacielos se yerguen en las largas calles como inacabables Jehovás! ¡Moloch cuyas fábricas sueñan y croan en la niebla! ¡Moloch cuyas chimeneas y antenas coronan las ciudades! 

¡Moloch cuyo amor es aceite y piedra sin fin! ¡Moloch cuya alma es electricidad y bancos! ¡Moloch cuya pobreza es el espectro del genio! ¡Moloch cuyo destino es una nube de hidrógeno asexuado! ¡Moloch cuyo nombre es la mente! 

¡Moloch en quien me asiento solitario! ¡Moloch en quien sueño ángeles! ¡Demente en Moloch! ¡Chupa vergas en Moloch! ¡Sin amor ni hombre en Moloch! 
¡Moloch quien entró tempranamente en mi alma! ¡Moloch en quien soy una conciencia sin un cuerpo! ¡Moloch quien me ahuyentó de mi éxtasis natural! ¡Moloch a quien yo abandono! ¡Despierten en Moloch! ¡Luz chorreando del cielo! 




Alan Ginsberg

 Aullido (Fragmento)
Para Carl Salomón 

sábado, 24 de mayo de 2014

La agroecología -1

La agroecología puede ser definida como el manejo ecológico de los recursos naturales a través de formas de acción social colectiva que presentan alternativas a la actual crisis civilizatoria. Y ello mediante propuestas
participativas desde los ámbitos de la producción y la circulación alternativa de sus productos, pretendiendo establecer formas de producción y consumo que contribuyan a encarar el deterioro ecológico y social generado por el neoliberalismo actual.


(Sevilla y Woodgate, 1997 y 1998).

viernes, 23 de mayo de 2014

Agroindustria - 3

La dictadura del automóvil, producto-piloto de la primera fase de la abundancia mercantil, se inscribe en el territorio con el dominio de la autopista, que disloca los antiguos centros urbanos y pone en marcha una dispersión siempre creciente. Al mismo tiempo, los momentos de reorganización parcial del tejido urbano se polarizan provisionalmente en torno a esas «industrias de la distribución» que son los supermercados gigantescos, edificados en descampados, sobre un pedestal de aparcamientos; y esos templos del consumo acelerado están ellos mismos en fuga permanente, incluidos en el movimiento centrífugo que les desplaza a medida que
se convierten en centros secundarios sobrecargados, pues han provocado una recomposición parcial de la aglomeración. Pero la organización técnica del consumo no es más que el primer nivel de la disolución generalizada que ha llevado a la ciudad a consumirse a sí misma.


Guy DEBORD (1999: 147, escrito en 1967)

martes, 20 de mayo de 2014

Hay


Hay cosas ocultas a sí mismas.
Así que casi humanas
tal vez pudieran revelarse en nosotros
y sonriendo dejarnos desnudos ante todo.
Pero nuestra ignorancia es tanto más excepcional.
Se está más caliente junto a los animales…

Vladimir Holan
(Trad. Clara Janés)

LA AGRO-INDUSTRIA - 2

Hoy en día, más de mil millones de personas en el planeta no tienen suficiente comida para comer. Alrededor del 80% de estas personas son los productores de alimentos que viven en el campo. Esta situación intolerable no se debe a la falta de alimentos o de tecnología. Es debido a las políticas de los gobiernos que deliberadamente reemplazan la agricultura campesina por un modelo industrial impulsado por las necesidades de las empresas multinacionales de la alimentación

miércoles, 14 de mayo de 2014

Carta a Lucinio


Desde las tierras altas
ahora he venido
a parar en el llano
de polvo y ruido.

No sé quien me ha empujado
ni me ha traído,
acuérdate Lucinio
este verano
cuando el pantano baje
de ir al collado,
y en la tumba de madre
ponerle un recado.

También piensa en Vicente
y en Indalecio
que bajo tanta roca
quedaron yertos.
Por aquí veo a sus viudas
con sus aprietos.

Escupe al pantano
y a quien lo hizo
que nos quitó la tierra,
casa y panizo.
Y al fin tras tantas horas
nada tuvimos.

De todo lo que daban
nada nos dieron.
Trabajo para los hombres
aquí lo hicieron.
A todas horas ruido,
sofoco y miedo.

Algunas veces pienso
ir al pantano
y cuando esté bien lleno
tirarme dentro
y hundirme a estar contigo
como hace tiempo.

  (José Antonio Labordeta)

martes, 6 de mayo de 2014

TANTAS ESTRELLAS


TANTAS ESTRELLAS que
nos ofrecen. Yo estaba,
cuando te miré —¿cuándo?—
fuera en
los otros mundos.

Oh esos caminos, galácticos,
oh esa hora, que nos
preponderó las noches en
la carga de nuestros nombres. No es
verdad, lo se,
que viviéramos, sólo
pasó ciego un aliento entre
el allí, el no-allá y el a veces,
como un cometa silbó un ojo
hacia aquello extinguido, en las gargantas,
allí, donde se entremoría el fulgor, estaba
espléndido en tetas el tiempo,
en el que ya crecía, decrecía
y recrecía lo que
es o fue o será,
yo sé,
yo sé y tú sabes, sabíamos
no sabíamos, sí
estuvimos aquí y no allí,
y a veces, cuando
sólo la nada estaba entre nosotros, nos encontramos

uno al otro totalmente.




LA ROS A DE NADIE 
Paul Celan